Asistimos a la plegaria de Taizé organizada por la parroquia de Sant Andreu.
Disfrutamos de unos momentos de recogimiento muy enriquecedores con cantos, textos del Evangelio, paz, silencio y comunidad, rodeados de un entorno acogedor con símbolos llenos de significado que invitaban a la vivencia de la relación con Dios.
¿Qué más podemos pedir en momentos de reflexión y de conversión?
Gracias por la iniciativa.
Agnès Benedicto