Del día 1 de septiembre al 4 de octubre la Iglesia celebra el Tiempo de la Creación.
El logo de este año para el Tiempo de la Creación es la zarza que quema sin consumirse.
Los incendios que se han producido este verano en todo el mundo son un signo de los devastadores efectos que está teniendo el cambio climático. La codicia humana, la desertización y el uso indebido de la tierra conducen a la desintegración de los ecosistemas, la destrucción de los hábitats, la pérdida de los medios de subsistencia y la desaparición de las especies a un ritmo alarmante. La creación grita mientras los bosques crepitan, los animales huyen y las personas se ven obligadas a emigrar a causa de los incendios de la injusticia que hemos provocado.
Muy al contrario, el fuego que gritó a Moisés mientras pastoreaba el rebaño en el monte Horeb no destruyó ni consumió la zarza. Fue la llama del Espíritu que revelaba la presencia de Dios en la vida. Aquel fuego sagrado afirmó que Dios escucha los gritos de todos los que sufren y prometió que estaría entre nosotros si lo seguimos fielmente hacia la liberación de la justicia. Durante el Tiempo de la Creación, este símbolo nos llama a escuchar la voz de la Creación y a responder fielmente a través del culto, el arrepentimiento y la acción.
Se le dijo a Moisés que se sacara las sandalias porque estaba de pie en tierra sagrada delante de Dios. Que este símbolo nos mueva a sacarnos “las sandalias” de nuestros estilos de vida insostenibles que nos desconectan de la Creación y de nuestro Creador.